Existen muchas formas de mejorar un diseño o experiencia de usuario; una de ellas, no por obvia menos importante, es preguntarles directamente a los usuarios. Pero esta no debe ser la única, pues es aun mejor completar esas respuestas con otras herramientas, como por ejemplo los heatmaps.
En ocasiones, los usuarios no sabemos qué queremos, o no sabemos explicarlo, o mentimos. Los heatmaps no mienten y tienen un valor muy grande para mejorar experiencias de usuario y conversiones, partiendo de pruebas irrefutables: no se basan en lo que los usuarios dicen, sino en lo que los usuarios hacen.
Un heatmap o mapa de calor es una representación de datos, mostrada como mapa o diagrama de los valores de esos datos en forma de colores. Si te gusta el fútbol, habrás visto en numerosas ocasiones cómo utilizan los heatmaps en televisión para mostrar la zona del campo por la que se mueve un futbolista determinado.
El uso de los heatmaps en sitios web o aplicaciones responde al mismo concepto: se trata de un software que tiene como funcionalidad la de grabar sesiones de usuario, y mostrar luego su comportamiento en forma de colores: ¿dónde ha hecho clic? ¿Ha hecho scroll? ¿Ha hecho clic en el CTA que nos interesa? ¿Tal vez el CTA no se ve en mobile above the fold y no ha llegado a verlo? ¿Estamos perdiendo conversiones? Los especialistas en optimización de conversiones pueden extraer mediante los heatmaps conclusiones muy valiosas para su trabajo.
Un software que dispone de heatmaps que ayudan a mejorar las experiencias de usuario es Hotjar. Pero además de heatmaps, dispone de muchas otras funcionalidades que completan la visión sobre lo que los usuarios quieren y lo que les importa durante su navegación.
Funcionalidades de Hotjar para comprender mejor a los usuarios
- Heatmaps y grabación de sesiones: los mapas de calor, como hemos explicado previamente, nos ayudan a saber qué interesa a los usuarios. Pero es muy relevante completar esta información con las grabaciones de sesiones, porque ahí no solo vemos dónde han hecho clic, sino que se pone a prueba la usabilidad del sitio al ver todo el proceso del usuario: sus clics y scroll en orden cronológico, así como su navegación por distintas páginas.
- Funnel de conversión y análisis de formularios: Con esta funcionalidad, propia de herramientas de analítica web, es posible comprobar de un vistazo en qué parte del funnel abandonan los usuarios o en qué punto del formulario desisten de rellenarlo, permitiendo identificar puntos de mejora.
- Preguntar, preguntar, preguntar: a pesar de que hemos comenzado el artículo reconociendo que preguntar a los usuarios puede no ser la mejor pista para la optimización de conversiones, insistimos en que eso es solo si únicamente se lleva a cabo esa acción, sin complementarla con las otras acciones explicadas. Pero preguntar a los usuarios es siempre interesante, relevante y también un síntoma de buena salud de un negocio. Hotjar dispone de diversos tipos de encuestas configurables para lograr el feedback necesario.
Solo queda combinar este feedback con el resto de funcionalidades para disponer del mejor punto de partida para mejorar la experiencia y optimizar las conversiones.